- diciembre 21, 2011
- in Insolvencia Empresarial - Asesoría y consejos, Noticias
- by IURE Abogados
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El Grupo Tragsa dedicada a favorecer el desarrollo sostenible del medio rural y marino, con proyectos que cuidan el medio ambiente y mejoran la calidad de vida de las personas, acumula una deuda pendiente de cobro de 550 millones de euros, la mayor parte por impagos de las comunidades autónomas.
Dichos impagos han supuesto un retroceso en el 18,8% de las ventas, una caída del 50% de sus beneficios y un deterioro del 2% del margen sobre ventas.
Entre las comunidades que más adeudan al grupo, figura la comunidad valenciana, destacando en el otro extremo la comunidad gallega.
No obstante, a pesar del retroceso de dichos resultados, la empresa sigue manteniendo una situación sostenible. Todo ello debido a los últimos encargos de construcción de dos paradores, y por su presencia en el exterior adjudicándose un 10% de los concursos.
Por tanto la dirección de la empresa ha cerrado 2011 con una empresa «saneada», con «capacidad de supervivencia y garantía de continuidad».